La secta que recoge ropa usada (1)
por Luis Santamaría
“Tirar ropa usada al contenedor de Humana forma a 2.700 profesores cada año”. Así titulaba el pasado 20 de septiembre un despacho la agencia Efe, informando sobre la ONG Humana People to People, que actúa en todo el territorio nacional. ¿Por qué hablamos aquí de una ONG? Dedicaremos algunos artículos a explicarlo todo. En este primero, la versión de la propia organización, que ha proporcionado su versión de sus propias actividades.
La versión de Humana: cooperación para el desarrollo
Según leíamos en Efe, las 16.000 toneladas de ropa usada que anualmente la ONG Humana recoge en sus contenedores sirven para formar a 2.700 profesores cada año, que ejercen en escuelas de educación primaria de zonas rurales de Angola, Mozambique, Malawi e India. El presentador Carlos Sobera y la atleta Nuria Fernández han prestado su apoyo a los proyectos de esta ONG española, que mediante la gestión de las donaciones de ropa usada, realiza proyectos de cooperación, desde 1987, en distintos países de África subsahariana, Sudamérica y Asia.
“Humana People to People” recibe la ropa a través de los 3.500 contenedores, ubicados en seis comunidades autónomas, la selecciona y vende a través de sus tiendas -las de mejor calidad- o directamente a la población africana, para invertir el dinero en proyectos educativos, de seguridad alimentaria, salud y de desarrollo comunitario.
“Tenemos acuerdos con los ministerios de Educación de los países con los que trabajamos para formar a maestros locales de primaria, que deberán impartir las clases en el área rural, donde se convierten en movilizadores sociales y, en muchos casos, en líderes de la aldea”, ha explicado Rafael Más, responsable de comunicación de la ONG.
Los 11.000 profesionales formados por esta organización “son personas que viven en zonas rurales, con vocación educativa y que pasan a convertirse en maestros en su mismo pueblo” e imparten enseñanza a medio millón de niños. Respecto a las personas que adquieren ropa en alguna de las 20 tiendas de Humana en España, el portavoz de la ONG ha explicado que la mayoría son inmigrantes -que buscan productos baratos- y gente joven -que quiere además “algo diferente”-; también son clientes personas “del mundo del espectáculo, intentando localizar ropa antigua”.
Humana tiene acuerdos con 700 ayuntamientos y unas 500 entidades -principalmente colegios, parroquias y asociaciones de vecinos- para instalar los contenedores y desarrolla 250 proyectos de cooperación.
Según explicó Más, “llevamos 17 años trabajando en África subsahariana y desde entonces se han formado más de 11.000 profesores, con un coste medio de 4.000 euros por docente”. Lo ha recogido la agencia Servimedia. El 60% de esta cantidad lo aporta Humana y el resto corre a cargo del gobierno local, mientras que el alumno debe pagar una fianza de 300 euros para asegurar su permanencia en los centros, explicó.
“Procuramos que el 50% de los nuevos matriculados sean mujeres”, afirmó Más, “y como en algunos países son muy pocas las que llegan a cursar los estudios necesarios, también promovemos programas de refuerzo específicos”, destacó. A su juicio, el motivo es muy sencillo: el impacto de una maestra en un pueblo es mucho mayor que el de un hombre, “en especial entre las niñas”.
Se trata de un aspecto “muy importante” para una entidad cuyos docentes, además de aprender pedagogía y matemáticas, “se forman para convertirse en dinamizadores sociales”, subrayó. Más explicó que todos ellos pasan a trabajar como funcionarios de los ministerios de Educación de sus países, donde se ocupan como maestros en zonas rurales.
De hecho, aseguró, la mayoría procede de los mismos pueblos donde quieren trabajar, por lo que en general es gente muy humilde, cuyas familias deben hacer un gran esfuerzo económico para ahorrar la fianza de la formación.
Según su portavoz, Humana recoge al año 16.000 toneladas de ropa usada, de la que un 10% (la de mejor calidad) se vende en las 20 tiendas de España, un 50% se comercializa a bajo precio en los países africanos, un 25% se recicla para obtener algodón y lana y un 15% se elimina. “De esta forma, obtenemos fondos para nuestros programas educativo”, apuntó, como las “Escuelas de Profesores", los centros de formación profesional en África o las escuelas preescolares, que atienden a 14.000 niños en África Subsahariana, Asia y Sudamérica.
Humana también desarrolla programas de lucha contra el sida, seguridad alimentaria, protección del medio ambiente y desarrollo sostenible, todos ellos sostenidos con la venta de ropa. El reto es ampliar su presencia en las ciudades y pueblos de España para aumentar la recogida de prendas, señaló la ONG, que pidió a los ayuntamientos “colaborar” y permitirles “la instalación de más contenedores”.
Pero… no es oro todo lo que reluce. En estas informaciones no aparece que muchas instituciones y ayuntamientos, en la última década, han suspendido sus contratos con Humana, después de haber conocido las acusaciones que pesan contra esta institución a lo largo de todo el mundo. ¿Qué se esconde detrás de Humana? Iremos informando en artículos posteriores.
La secta que recoge ropa usada (2)
Después de la información que hemos ofrecido, reproduciendo lo que dice la propia “ONG Humana”, veamos en esta segunda parte algunos datos sobre la organización y, sobre todo, sobre el grupo Tvind, que está detrás de Humana.
Hace unos años, el medio digital El Plural publicó un artículo en el que revelaba lo que se esconde detrás de Humana. Según informaba, la Red de Ciudadanos Preocupados por Humana (entidad ya desaparecida) y diversos organismos estatales denunciaron una secta disfrazada de ONG. Se trata de las ONGs españolas Humana y Fundación Pueblo Para Pueblo, que son utilizadas como pantallas caritativas fraudulentas del grupo Tvind, considerada una secta destructiva. Estas supuestas ONGs, además de recoger ropa usada con el pretexto de enviarla a países en vías de desarrollo, se dedican al apadrinamiento de niños.
La denuncia de la Red de Ciudadanos Preocupados por Humana explicaba que la ONG Humana, ahora Fundación Pueblo para Pueblo, está financiada por la secta Tvind, que tiene su base en Dinamarca. Estas denuncias se vienen produciendo desde hace casi dos décadas, ya que numerosas ONGs alertaron sobre los dudosos procedimientos que Humana empleaba para sufragar supuestos proyectos de ayuda en el tercer mundo.
Los hechos, según Luis Santamaría, miembro de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES) que fue consultado en este reportaje, son que “Humana funciona como aparato financiador de Tvind. Hace muchos años que este grupo firma convenios con ayuntamientos españoles y otros organismos para instalar contenedores donde la gente deja la ropa usada”. Estas prendas serían teóricamente enviadas a países del Tercer Mundo con fines benéficos.
Pero la realidad es diametralmente distinta: “Las remesas tienen varios destinos”, explica Santamaría. “Una parte se consigna a cupos de catástrofes; otra se recicla; una tercera va a parar a tiendas de segunda mano españolas; y la cuarta es la más nociva de todas, porque se envía a África para comerciar con ella, produciendo un grave daño a los endebles comercios locales”, como denuncian algunas instituciones textiles. Según Santamaría, Tvind es “una secta destructiva, pero sin contenido religioso explícito”.
Según los expertos que la conocen desde dentro, utiliza las técnicas de desmembramiento de la personalidad para fines lucrativos. “La Fundación Pueblo para Pueblo es hoy la pantalla pública de Tvind en España. No se sabe a cuántos españoles han podido captar en todo este tiempo”, aseveró. Humana legalizó sus estatutos en Cataluña en 1987. Desde entonces sus relaciones con las organizaciones benéficas no han sido precisamente fluidas. Jamás participó en actividades conjuntas con las otras ONGs catalanas. UNICEF declaró explícitamente en ese momento que ninguna vinculación les unía con Humana.
Fue en 1993 cuando se denunció por primera vez que Humana era una secta. Sucedió en el congreso internacional sobre grupos totalitarios y sectarismo que congregó a numerosos expertos internacionales en Barcelona. Finalmente, ante las reiteradas denuncias que se produjeron en los últimos años, Humana decidió cambiar de nombre. Ahora se llama Pueblo para Pueblo y han reconducido su actividad al apadrinamiento de niños.
La secta que recoge ropa usada (3)
Para que los lectores puedan comprobar la importancia y la extensión de la ONG Humana, la cara pública de la secta danesa Tvind, publicamos ahora no una fuente española, sino unas noticias traducida del boletín francés Bulles, publicado por la asociación UNADFI, en su nº 62.
A principios de 1999 una joven francesa, con deseos de dar su tiempo a una organización humanitaria, se siente atraída por un anuncio aparecido en una revista mensual de un kiosco. Es una invitación para quedar, todos los gastos pagados, en la estación central de Copenhague un viernes por la tarde para entrevistarse y ponerse en manos de la organización con vistas a un trabajo humanitario en Dinamarca o en el extranjero.
Efectivamente, una quincena de jóvenes europeos son enviados en minibús hacia un centro situado en Fionia. Este centro ocupaba una docena de hectáreas al amparo de los edificios escolares con internados. Briefing incesante durante la hora y media de trayecto; simple introducción para el week-end intensivo, donde fueron ensalzadas todas las virtudes de esta organización de extensión mundial consagrada a la lucha contra el subdesarrollo. Para empezar, y con el fin de mantener su nómina, los alistados ingresaron el equivalente de 8000 FF, y se entiende que también trabajaron para el mismo fin. Destacar que en 1998 un ruso, sintiéndose doblemente explotado, presentó una denuncia.
Al final del week-end, al menos la cuarta parte de los invitados habían firmado su contrato, mientras que nuestra compatriota, adivinando el engaño, había regresado en compañía de una danesa. Ésta dijo que había estado allí con una jovencísima escandinava, la cual le había parecido más bien recluida bajo el pretexto de enfermedad, y que le había recomendado que huyera rápido. Hay que destacar que los candidatos franceses son menos codiciados que otros; su espíritu crítico parece ser la causa.
Curioso poder
Curioso poder
Sí, curioso imperio el fundado en 1968 por un maestro, que la muy tolerante autoridad académica danesa tendría que haber destituido por demasiado extraño. Es entonces cuando este réprobo funda las “Pequeñas Escuelas” como centros de acogida pedagógica privada para niños y adolescentes con problemas (casos sociales).
Como fuentes de recursos se conocen las campañas de recogida de ropa que rápidamente se extendió a muchos países europeos. Enseguida el estado danés subvenciona las Pequeñas Escuelas, y en 1996 el Ministerio de Educación Pública votó la “ley Tvind” que suprimía la mayor parte de las subvenciones; pero fue abolida en 1998 porque había sido votada de forma irregular.
Se extiende como la pólvora
Se extiende como la pólvora
Durante este periodo de dificultades en Dinamarca, lo que la prensa danesa calificó de “imperio” o de “cártel Tvind”, se extendió con fuerza por el mundo entero, sobre todo en los países subdesarrollados. La dirección central está ahora en Zimbabue, bajo el nombre de UFF/Humana, con extensos edificios y bajo la protección de las autoridades oficiales.
Tvind trabaja en los Estados Unidos y sigue basándose en las mismas estructuras (recogida de ropa y escuelas). En América Central y América del Sur lo hace con plantaciones, fuentes de rentas muy seguras. Recientemente han aparecido empresas Tvind en India y en China. Su presencia se deja ver también en la Polinesia Francesa y por último en Italia y Portugal (cédula disponible en la UNADFI).
Todo esto es tanto más curioso cuanto que el fundador, con 60 años en 1999, llevaba desaparecido 20 años, según un informe de la prensa danesa.
Asociación Internacional contra Tvind
Asociación Internacional contra Tvind
El 22 de noviembre de 1998, en el diario danés Jylland Posten, Lars Roger Sörensen anunciaba con el título “La lucha contra Tvind se hace internacional” la fundación en Copenhague de la “Foreningen Mod Tvind” (Asociación contra Tvind), de la que la asociación danesa “Dansk Foreningen Mod Tvind” forma parte.
Esto da lugar a la constatación por parte de las organizaciones nacionales de que por separado, al cabo de 26 años, no han podido solucionar este asunto de amplitud internacional.
El portavoz noruego, Morten Petersen, se expresa de acuerdo con sus colegas daneses, suecos y alemanes en una página de Internet. Establecen contactos con Estados Unidos, Países Bajos y Bélgica. El objetivo es: “obtener el máximo de información y dar a las gentes, a los maestros y alumnos que están en el sistema Tvind, la posibilidad de informarse a través de una fuente ajena al sistema”. En la mayoría de las instituciones Tvind los periódicos no son fenómenos diarios.
Nuevo empuje en Dinamarca
Nuevo empuje en Dinamarca
En 1998, superada la presión gubernamental, se abre una casa socio-pedagógica Tvind (Pequeña Escuela) en Nakkeböle en un ex-sanatorio; la capacidad de esta casa, prevista al comienzo para un centenar de jóvenes problemáticos, se reduce a 60. Esta instalación se llevó a cabo a pesar de la oposición del 70% de los habitantes de la comunidad y de la de los especialistas en estos casos, que consideran tal concentración como peligrosa.
La norma general admite que haya entre 5 y 8 en el mismo lugar. Desafiando esta opinión Poul Jörgensen, portavoz de Tvind, declaró que 10 nuevos centros del mismo estilo fueron fundados recientemente y que otros estaban preparándose. El artículo concluye: “Ha encontrado un nuevo método para abusar del Estado danés y probablemente del Estado noruego”.
¿Humanitario Tvind?. Se impone examinar el lado oculto…
La secta que recoge ropa usada (4)
Aunque llevamos varios artículos publicados sobre laONG Humana, no ha quedado muy claro hasta ahora en qué consiste la secta Tvind, su corazón, más allá de los testimonios de víctimas relatados en el artículo anterior. Por ello publicamos otro artículo publicado por la asociación francesa dedicada a las sectasUNADFI, traducida del boletín Bulles, nº 69. En la fotografía de la izquierda puede verse a su fundador y líder, Mogens Amdi Petersen.
¿Qué se sabe de Tvind - Humana?
¿Qué se sabe de Tvind - Humana?
Cinco testimonios recientes dados a UNADFI por personas entre 20 y 34 años, interceptadas a partir de pequeños anuncios, nos invitan a volver sobre Tvind (cf. Bulles nº 62).
Estas publicaciones en Bulles han sido hechas para abrir los ojos de las personas metidas en este camino desastroso. TVIND, HUMANA, PEOPLE TO PEOPLE, HOPE, PLANET AID (Massachusetts), TRAVELLING FOLK HIGH SCHOOL TVIND, NET UP, etc…, ¿distintas máscaras y un mismo fenómeno?
Los anuncios de este “cártel” danés (la prensa local habla de imperio o de cártel) siguen apareciendo en revistas leídas por jóvenes en Francia, Gran Bretaña, Escandinavia, Países Bálticos, Rusia, etc. Atraen a los espíritus generosos, a quienes se envía a entregar su juventud al “tercer” o “cuarto mundo”. Una vez más los jóvenes son explotados de forma grosera.
Autoridades compañeras de ruta
Hay que subrayar que, a despecho de fuertes reacciones a nivel gubernamental danés, autoridades locales, incluso judiciales, con honorables razones, son cómplices en estas desviaciones, arriesgándose a destrozar vidas. En verano de 2000, un importantísimo municipio en el norte de Copenhague autorizó a Tvind a que instalara en su territorio una de sus “Efterskoler” destinadas a casos problemáticos.
Estas autoridades dan subsidios y convenios de acción social (como en el caso de El Patriarca), porque creen tratar un problema actual, satisfaciendo así al electorado. Como por casualidad se encontró un universitario para escribir ex cátedra en la prensa diaria de forma favorable a Tvind, contradiciendo un testimonio aparecido en un gran diario.
El Ministerio de Enseñanza danés denegó en 1999 las subvenciones del Estado a 11 de las 31 escuelas Tvind establecidas en el país. La lucha entre la secta y la justicia continúa desde 1996 (cf. Bulles nº 63). A finales de diciembre de 1999 este asunto, del que los juristas hacen, parece, sus delicias, se ha convertido en un asunto de Estado. Politiken titulaba el 26 de diciembre de 1999: “El Parlamento danés ante el Tribunal Supremo”.
“La ley específica (llamada ley Tvind) que ha denegado a 32 escuelas Tvind las subvenciones del Estado, se vuelve como un boomerang contra el Parlamento. En efecto, con la unanimidad de los juzgados, el Tribunal de Apelación del Estado estimó que la ley específica era contraria a la Constitución, que establece el principio de la separación de los poderes legislativo, ejecutivo y judicial”.
“Suprimiendo la subvención del Estado, el Parlamento se erige en juez”. “El artículo 13 de la Constitución protege a los ciudadanos por la ley… El Parlamento ha cometido un error en este caso”, porque se ha erigido en jurisdicción de excepción. Este decreto ha sido aprobado por un profesor de Derecho público de Aarhus.
Como revancha, y ante las acusaciones de desviación de fondos del orden de 60.000.000 de Kr (55 millones de francos franceses), según antiguos empleados de Tvind para la TV danesa oficial en agosto de 2000, la policía judicial especializada en la delincuencia económica, dio a conocer un sumario que contenía 6 años de las actividades de Tvind-Fond, gerente de las finanzas de Tvind.
Se trata de establecer si Tvind, que está libre de impuestos en virtud de sus proyectos de beneficencia, ha desviado fondos hacia diversas organizaciones ligadas a su sistema. A todo esto sigue la ausencia de respuestas de Tvind a innumerables órdenes de pago emitidas por los Ministerios de Justicia y del Tesoro, así como de las Aduanas, que siguen muy de cerca este asunto (Frederiksborg AMT avis, 1 sektion, 23/8/2000 p. 6).
Un tránsfugo enriquecido
Un tránsfugo enriquecido
El Kritelig Dagblad (Copenhague 27/7/1999) publicó el relato de Steen Thomsen cuyo original ocupa 35 páginas. Miembro del equipo directivo de Tvind hasta 1998, es decir, durante 25 años, Thomsen dice lo siguiente:
“El líder y fundador del grupo, Mogens Amdi Petersen (60 años; maestro destituido de su ministerio) controla a los miembros del “laerergruppen” (equipo de dirección) totalmente: su economía privada, su vida intelectual, social y sexual”. Según Thomsen, la “secta Tvind puede ser considerada semejante en muchos puntos con la secta Moon… Esta semejanza consiste en la estricta jerarquía, en su expansión mundial y en su carácter emprendedor”.
“Durante largos años, he apoyado de todo corazón las actividades de Tvind; he ofrecido mi salario, mi patrimonio, mi vida privada y mi derecho a expresarme y pensar libremente; pero desde que mi apoyo disminuyó, he sufrido presión. El hecho de que haya tardado tanto en dejar el “laerergruppe”, puede ser explicado por el hecho de que durante muchos años consideré a Tvind como una organización para la búsqueda de la libertad, antes de que me pareciera como una secta con todas sus características”.
“Los miembros de Tvind son guiados por un pensador que es extremadamente atrayente, con rasgos de personalidad psicopatológicos, paranoicos y megalomaniacos. La organización está cerrada para el resto de la sociedad. Postula que el mundo exterior a ella está lleno de enemigos. El espionaje y la sospecha recíprocos van a la par con una estructura estrechamente dirigida desde arriba. Los miembros son debilitados, por ejemplo, por medio de la falta de sueño o por la forma diaria de la comida. El terror es moneda corriente, por ejemplo, denunciando a algunas personas ante otros miembros de la secta”.
“De 600 a 700 ex miembros piensan que Tvind es una de las sectas de extensión mundial más poderosas”, escribe Thomsen. “Va desde la explotación forestal en Brasil y Borneo, hasta la empresa comercial de Pekín”. Las tres metas de la organización, según el mismo, son:
1.- Procurarse dinero.
2.- Organizar grupos para Tvind en todo el mundo.
3.- Desarrollar (extender) el poder de M. A. Petersen.
Punto de vista del psicoanalista
2.- Organizar grupos para Tvind en todo el mundo.
3.- Desarrollar (extender) el poder de M. A. Petersen.
Punto de vista del psicoanalista
Cyril Malka, psicoanalista, especializado en Dinamarca en el tratamiento de personas con traumatismos debidos a grupos totalitarios o a sectas religiosas, ha estado en contacto con algunos tránsfugos de Tvind, pero sin haberles tratado. Ha declarado al Kristelïg Dagblad (ibid.):
“Todo lo que puedo decir después de mi experiencia es que Tvind se parece mucho a la secta Moon y a la Cienciología. No veo diferencia esencial alguna, aunque Tvind se basa en una ideología política y no en una concepción religiosa de la vida. En todo caso, según mi evaluación, tengo que decir que el control de los miembros es más estrecho en Tvind… que en los Testigos de Jehová. Allí al menos los miembros tienen alguna forma de autonomía”.
¿El quid de Mogens Amdi Petersen?
¿El quid de Mogens Amdi Petersen?
Este genio de la organización, del cuadro negro a la carambola, pasando por la ropa vieja y recordando que fue, después de su revocación de la enseñanza pública en la Dinamarca ultra liberal, el promotor de la energía eólica y de su expansión en el país, no había reaparecido desde hacía 20 años cuando, a principios de 1999, la prensa señaló el 60 aniversario del fundador.
Bruscamente, la primavera del 2000, debió sentir la necesidad de reducir los cargos. Concierta una gran reunión de los cargos de la organización llegados de los cinco continentes a su suntuosa residencia personal en Florida. Es la primera vez que una secta atraviesa el Atlántico Norte. Aún no ha sido reconocida como religión por el fisco federal americano (IRS). ¡Paciencia! ¡Es tan caritativa!
Mientras tanto, es necesario estar alerta en Francia, pero también en la Polinesia francesa (cf. Morgen Avïsen, Jullands Posten, 1/3/1998), porque la dirección contaba con los últimos reclutas franceses para relanzar el asunto entre los recalcitrantes franceses.
No hay comentarios:
Publicar un comentario