“Es el más grande del mundo. Para mí, es dios en el fútbol”, dice Gustavo Caballero, de 33 años, aún incrédulo ante la noticia de la muerte de Diego Armando Maradona, el ídolo argentino que esta vez no pudo vencer a la muerte que lo había acechado en tantas ocasiones. Alrededor del Obelisco de Buenos Aires, tradicional punto neurálgico de festejos futbolísticos, un millar de fanáticos del “10” se convocaron el pasado 26 de noviembre a homenajearlo, a instancias de la Iglesia Maradoniana, esa suerte de credo pagano o parodia de religión que rinde culto al ex capitán del equipo campeón mundial en México-1986.
Según leemos en el diario ecuatoriano El Universo, desde que Maradona alzó la copa en México-1986 y deslumbró al mundo con su zurda, no paró de despertar pasiones en su país. No fue sólo la conquista deportiva, además se erigió en símbolo del desafío al poder establecido. Su estilo provocador y rebelde sumó adeptos pero también enemigos, contra los que supo usar su lengua filosa con ingenio burlón.
Nadie en Argentina olvida sus dos goles a Inglaterra en cuartos de final (2-1) de aquel mundial en México: el primero, la célebre “mano de Dios”, como él mismo bautizó su tanto anotado con la mano, y el segundo, una carrera prodigiosa con el balón pegado al pie considerado como el mejor gol de la historia de los mundiales.
La iglesia o secta Maradoniana fue establecida el 30 de octubre de 1998 por Hernán Amez y Alejandro Verón, quienes creen que la acción de Maradona frente al equipo inglés fue ''un milagro''. Por ello consideraron que su ''dios'' debería tener su templo, así crearon esta iglesia en el barrio La Tablada de Rosario, a unos 300 kilómetros de Buenos Aires.
El día de la fundación, Amez y Verón celebraron el cumpleaños de Maradona diciendo que “hoy nació dios”. Desde entonces siempre conmemoraron el nacimiento del ex futbolista y fue en 2001 cuando decidieron hacer una actividad mayor a la que asistieron unos 120 fans, quienes prometieron ser fieles al ex futbolista argentino. Se estima que ahora existen cerca de 500.000 personas en diferentes países que profesan este culto.
Los feligreses maradonianos conmemoran las fechas más importantes del jugador e incluso han adaptado las conmemoraciones católicas a su dios. Por ejemplo, la “nochebuena maradoniana” es el 29 de octubre y su navidad el 30. Es decir, estos hinchas se encuentran en el año 60 d.D (Después de Diego). Como si de una mezcla de Navidad y Fin de Año se tratase, la noche del 29 de octubre estos fanáticos se reúnen a esperar las 00:00 para realizar un brindis por el natalicio de su “dios”. Además, las ''pascuas maradonianas'' se realizan el 22 de junio (en honor a los goles contra Inglaterra). Las celebraciones de esta última fecha consisten en reunirse para volver a apreciar las jugadas de Maradona frente a los ingleses. Así también, los fieles maradonianos han adaptado sus propias oraciones y un elenco de los diez mandamientos.
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