En diciembre de 2015, el TST comenzó una gira por cuatro ciudades llamada El ciclo del Sabbat, que consistía en la proyección de la película “The Witch” (La Bruja) – que ha sido uno de los éxitos 2016 – seguida de rituales satánicos con motivaciones políticas. El objetivo declarado del ciclo Sabbat era inspirar a una “revolución satánica”.
El TST cree que la separación de la iglesia y el estado se encuentra actualmente bajo el ataque por los conservadores religiosos radicales. También creen que hay una mayoría silenciosa que se opone a esta agenda, pero siguen siendo demasiado apáticos a hacer algo al respecto.
Por lo tanto el ciclo Sabbat fue un intento de aumentar la conciencia política de sus simpatizantes, atrayendo a los medios para su causa.
Sus campañas plantean serias dudas sobre la Primera Enmienda y el pluralismo religioso, y desafían al público a pensar en lo que se considera una “religión”.
Pretenden demostrar también cómo las instituciones gubernamentales favorecen al cristianismo de una manera que no debe ser tolerado por las otras religiones.
El TST alcanzó renombre en 2013, cuando se celebró un mitin en Florida para felicitar al gobernador Rick Scott por una ley que permitía a los estudiantes leer “un mensaje de inspiración de su elección” en las asambleas y eventos deportivos. Y así, la manifestación contó con un cartel que decía, “¡Hail Satan! ¡Hail Rick Scott!”.
Que el TST sea una religión verdadera ha sido un tema de debate, sin embargo, algunos miembros insisten que, si bien el movimiento es ateo, el grupo, al igual que otras religiones, tiene un conjunto compartido de valores, preocupaciones y símbolos (satanás como un símbolo de rebeldía).
templo satanico
Hoy TST tiene 17 capítulos en los Estados Unidos y Europa y dice que un estimado de 100,000 miembros – una cifra basada en la compra de tarjetas de socios y diversas formas de apoyo en línea.
Los capítulos del TST en todo el país han puesto en marcha campañas exigiendo los mismos derechos y privilegios religiosos que ofrece al cristianismo.
Estos han incluido la creación de libros para colorear satánicos para su distribución en las escuelas de Florida y Colorado; ofertas para erigir pesebres satánicos en la propiedad del gobierno en la Florida, Michigan e Indiana; oraciones a satanás en un partido de fútbol en Seattle; y exigir un monumento a Baphomet (un ídolo con cabeza de cabra asociado con aquelarres) junto al de los Diez Mandamientos en el Capitolio del Estado de Oklahoma.
Y también ha tenido iniciativas sobre temas sociales, por ejemplo, desde 2014 el TST ha invocado leyes estatales en Michigan y Missouri para exigir una exención religiosa para las leyes que dictan que los que buscan un aborto necesitan leer literatura sobre el aborto o soportar un período de espera, y además, ver aquí, aquí, aquí, aquí.
En muchos sentidos TST es la heredera de la “nueva izquierda” de la década de 1960 y de figuras tales como Abbie Hoffman y Allen Ginsberg.
Eventos como el “exorcismo” del Pentágono en 1967 demostraron que podrían cambiar lo que el Pentágono ha representado para al público, y el TST es un heredero de esto.
Pero voces conservadoras han afirmado que el TST demuestra lo que han dicho todo el tiempo – que Dios está con ellos y que sus oponentes políticos son, literalmente, demoníacos, como efectivamente lo son.
Leer más en detalles aquí:
http://theconversation.com/can-a-burgeoning-satanic-movement-actually-effect-political-change-57619
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