"La humanidad no encontrará la paz hasta que no vuelva con confianza a mi Misericordia" (Jesús a Sor Faustina)

lunes, 28 de noviembre de 2016

Estados Unidos: ex reclusa demanda a la prisión por impedirle practicar el satanismo



Una ex reclusa demandó al Servicio Carcelario para Mujeres de Nuevo México (EE.UU.) por violar su derecho constitucional de libertad religiosa al negarle la posibilidad de practicar el culto satánico mientras estaba entre rejas, tal como informa la agencia Efe.

Según los registros de la corte, Mónica Luján, quien cumplió una condena de tres años por tráfico de drogas y falsificación en el centro correccional de mujeres en Grants (Nuevo México), pidió sin éxito en varias ocasiones que le facilitaran La Biblia Satánica.

Luján argumenta en la demanda, presentada el pasado 4 de noviembre en una corte del condado de Bernalillo, que le negaron el derecho de practicar sus creencias, incluyendo el uso de materiales religiosos, la asociación y participación en rituales con otros reclusos que compartían sus creencias.

La hispana, que busca una indemnización por daños y perjuicios, asegura que la respuesta de las autoridades a sus peticiones fue que el Servicio Carcelario para Mujeres de Nuevo México (NMWCF) “prohíbe la práctica del satanismo”.


Micah McCoy, director de comunicaciones de la Unión Americana de las Libertades Civiles de Nuevo México (ACLU), que representa a Luján, dijo a Efe que el NMWCF negó a la hispana uno de sus “derechos fundamentales, el acceso a su religión y a la asociación con personas que practican su creencia”.
“Bajo la primera enmienda de la Constitución de los Estados Unidos, ella fue humillada por practicar una religión diferente”, consideró.

La demandante alega que los demandados, entre los que se encuentra un capellán, tomaron represalias en su contra y fue humillada, insultada y le confiscaron sus bienes personales, por lo que la dejaron, durante cuatro meses, con sólo una prenda de ropa interior.

Alex Sánchez, subsecretaria del centro penitenciario, dijo a medios locales que a los presos se les permite profesar su religión sin restricciones, siempre y cuando no atenten contra la integridad de los demás. “Nosotros reconocemos varias religiones, eso incluye sus días festivos, objetos religiosos y la forma de practicar dicha religión”, dijo Sánchez.

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