"La humanidad no encontrará la paz hasta que no vuelva con confianza a mi Misericordia" (Jesús a Sor Faustina)

miércoles, 6 de abril de 2016

El sectarismo laicista detrás de la idolatría del hombre por el hombre














A simple vista, y tal como lo presentan los medios, la reacción de los niños al ver a sus futbolistas preferidos, podría calificarse como "tierna", "conmovedora", "emocionante". Sin embargo, no es nada de esto: lo que demuestran las imágenes es el punto extremo al que llega la manipulación mental -y espiritual- de los medios masivos de comunicación, los cuales han logrado instalar, en la población mundial, la noción de que un futbolista -en menor grado, otros deportistas de otros deportes- es un "ídolo", en el sentido más literal de la palabra, al cual debe rendírsele veneración y respeto. Las imágenes de los niños, lejos de ser conmovedoras, son preocupantes, por este hecho que mencionamos, la idolatría del hombre por el hombre, construida artificialmente por los medios de comunicación. De hecho, el fútbol, tal como se presenta en la actualidad, presenta todas las características de una religión neo-pagana, cuyos edificios religiosos -los estadios de fútbol- y cuyos ídolos con pies de barro -los futbolistas-, han logrado desplazar del corazón de centenares de miles de fieles, el amor a la verdadera Iglesia, la Iglesia Católica, y la adoración al Verdadero y Único Dios, el Hombre-Dios Jesucristo, y esto es un dato que sumamente fácil de comprobar: mientras los estadios de fútbol -y las transmisiones televisivas- rebosan de gente, las iglesias están cada vez más vacías. No tenemos nada en contra del fútbol en sí mismo; tampoco tenemos inquina contra los futbolistas -es más, estamos orgullosos de nuestra Selección Nacional Argentina, una de las mejores del mundo, y también de contar con el mejor jugador del mundo, Leonel Messi-; estamos en contra del sistema mediático con el que se manipula a las mentes de los niños, principalmente -además de estar en contra de las cifras siderales que ganan los futbolistas, que se convierten en multimillonarios en muy poco tiempo, mientras miles de niños sufren desnutrición e incluso mueren de hambre, además de carecer de condiciones dignas para la vida humana. Presentamos este video, para hacer constar el avance del sectarismo laicista, que ha logrado grandes progresos con la construcción del nuevo ídolo de nuestros días, el fútbol.

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