"A Dios no lo podemos conocer del todo, pero
sí podemos saber lo que no es"
San Agustín
(Obispo de Hipona y Doctor de la Iglesia).
(Obispo de Hipona y Doctor de la Iglesia).
I. Origen y propósito
El 3 de febrero del 2003, la Santa Sede dio a
conocer un documento titulado "Una reflexión cristiana sobre
la Nueva Era", en dicho estudio se plantea la posición oficial de la
Iglesia Católica con respecto a este movimiento científico-
religioso que se remontan a la década de los años sesenta del
siglo pasado; haciéndose popular en gran parte del mundo moderno. Su
origen se debió al descontento de la juventud con la guerra en Vietnam,
el movimiento hippie, la revolución de la Soborna en París y
demás problemas sociales de la época. Sus líderes indujeron
a las nuevas generaciones al uso de las drogas fuertes, el sexo libre, el
rock pesado, la anarquía, el ateísmo y una rebeldía interior
a todas los valores religiosos, morales y culturales establecidos en el judaísmo
y el cristianismo. Su ideología abarca doctrinas extraídas del
hinduismo, el budismo, creencias persas, caldeas, egipcias, el animismo, el
panteísmo, la teosofía, el esoterismo, el ocultismo, la metafísica,
el gnosticismo y la masonería.
El principal objetivo de la Nueva Era es la búsqueda
del hombre como centro del universo, dando origen a un nuevo orden mundial
dominado por una nueva religión. Se trata pues de un "supermercado"
de creencias donde cada quien toma lo que le gusta y deja lo demás.
Esta forma de pensar ha sido visto como la terminación del proceso
evolutivo del "Super-Hombre", propuesto por el filósofo
alemán Friedrich Nietzche.
En resumidas cuentas la "Era Solar" como también
se le conoce, tiene cinco puntos básicos:
1. No hay un fundador reconocido particularmente.
2. No hay un libro sagrado que contenga toda
su doctrina.
3. No hay una estructura jerárquica organizada.
4. No tiene dogmas o mandamientos fijos.
5. No tiene un sistema religioso o filosófico
propio.
Hay tres etapas a los cuales los de la Nueva
Era quiere llevar a toda la humanidad, de una manera inconsciente:
1. "Iglesia Católica no, Cristo sí".
En este primer punto se pretende desacreditar a la Iglesia Romano y los religiosos,
para llevar al convencimiento de creer solamente en el maestro Jesús.
2. "Cristo no , Dios sí". En esta fase
se llega por medio de la enseñanza en un nuevo dios cósmico.
3. "Dios no, nueva religión sí".
Se logra con la instalación de centros de culto donde se practica lo
visto anteriormente, para encontrarse con el "super- yo".
Uno de los pilares para lograr tal fin, es cambiar
el concepto teológico de un Dios "creador" y "omnipotente" por un dios
"energía" o "fuerza"; quien se manifiesta en todo el universo como
conjunto (panteísmo), siendo además incapaz de intervenir en
los asuntos humanos. El hombre contemporáneo puede llegar a conectarse
con este "nuevo dios", no por la gracia divina, sino por su propio poder interior.
Se niega la existencia del bien y del mal, al igual que el pecado y la virtud.
En este sentido reconocen el principio de las religiones orientales que admiten
que todas las almas son divinas y forman una sola alma universal (Nirvana
budista), además al no existir un Dios supremo toda persona es su propio
juez. Incluso, cada individuo de acuerdo con su comportamiento terrenal determinará
su próxima reencarnación (Karma hinduista). Comparar con (Salmo
68,28; Proverbios 15,3; Isaías 40,28-29; Hebreos 4,13).
II. El papel de la astrología
La astrología también ha jugado
un punto importante en la llamada "Era de la Luz", pues se sabe que la historia
de la humanidad ha estado dividido en eras que se hallan regidas por determinadas
constelaciones que coincide con la precesión de los equinoccios, que
ocurre cada 2000 años aproximadamente; así por ejemplo:
A. Bajo la influencia de Tauro: (4230
a. C) surgieron los imperios y las religiones de Mesopotamia, como los persas
y los egipcios; quienes tenían como emblema divino un toro o becerro,
que aparece representado en varias pinturas y estatuidas de ese tiempo. además
fue el mismo ídolo que los judíos idolatraron en el desierto
del Sinaí (Exodo 32; Hechos 7,40-41).
B. Bajo la influencia de Aries: (2160
a. C) guió a la religión y la cultura judaica, representado
por la figura de un cordero o un cabrito; animales propios para el sacrificio
a Yahvé (Exodo 12,5; Levítico 16,20-22).
C. Bajo la influencia de Piscis: (Desde el siglo I de nuestra era) símbolo del cristianismo, que se
inicia con el nacimiento de Jesús, identificado por un pez; imagen
que se encuentra desde los inicios del cristianismo en las catacumbas romanas.
Esto se debe a que la palabra "Pez" en griego se escribe ICHTUS, que son las
iniciales de la frase: "Jesús- Cristo- Hombre- Dios- Salvador).
D. Bajo la influencia de Acuario: (2026 d. C) este acontecimiento marcará el comienzo de la "Nueva Epoca".
El signo del acuario es la mezcla de todas las religiones, pero principalmente
las de Oriente, Asia, Africa y Oceanía. Será un tiempo de abundancia
en doctrinas esotéricas y en sabidurías humanas (Deuteronomio
18,9-11).
III. La llegada del Nuevo Mesías
El plan de la redención humana que se
cumple con el sacrificio de Jesús en la cruz, pasa a un segundo plano.
Ya no es considerado como el "Hijo de Dios", sino un "Iniciado" o "Maestro
Espiritual" con la misma importancia de "Buda", "Krishna", "Zoroastros", "Mazda",
"Confucio", "Mahoma", "Gurúnanda", "Narayana", o "Ghandi". Siendo además
sus enseñanzas válidas para todos los hombres (Teosofía);
pues cada mensaje en complementario del otro, hasta que aparezca finalmente
un "Maestro Mundial", quien encarnará la divinidad humana en los últimos
tiempos. este "Nuevo Mesías" para los seguidores de la "Era Solar"
se vio identificado cuando en abril de 1982, se anunció en los veinte
periódicos más importantes del mundo el titular "Cristo ya está
aquí", en la persona de Lord Maitreya; maestro por encima de todos
los demás. Este extraño personaje asiático residente
en Londres, de quien se decía que era nada menos que el Ungido para
los judíos, el quinto Buda de los budistas, el Lord Krishna de los
hindúes y el verdadero Cristo para los cristianos.
Maitreya es el nombre de una divinidad budista
anterior al príncipe Shirdarta Gautama, el séptimo y último
Buda (el iluminado). Incluso, se aseguraba que este mismo sujeto fue el maestro
de Jesús de Nazareth, quien sólo había sido un Cristo
temporal. Ahora que Maitreya ha llegado, desaparecerán las enfermedades,
las penalidades y todos podrán convertirse en dioses mediante un procedimiento
secreto que él dará a conocer a toda la humanidad (Comparar
con Génesis 3,5). La actriz Shirley Maclane es llamada como la gran
sacerdotisa del movimiento, ella enseña en su propio programa de televisión
sus experiencias extra- dimensionales y ha escrito un libro relacionado con
lo oculto y con el cosmos espiritual, también afirma que
ha reencarnado nueve veces.
La veneración a la "Virgen María",
lo han relacionado con la antigua idolatría que se rendía a
la "diosa madre", como Isis en Egipto y Horus, la Mater Matuta del imperio
romano, Kali en el hinduismo; o también llamada en la Biblia como la
"diosa Reina del Cielo" (Jeremías 7,18; 44, 16-17).
IV. Variedad religiosa
La Era de Acuario pregona una serie de nuevas
técnicas como la meditación trascendental, el método
control mental Silva, la telepatía, el hipnotismo, el yoga, la gimnasia
china, el zen, las regresiones hipnóticas y la armonía corporal;
logrando así la proyección del "aura" o "cuerpo astral" de cada
ser. Del esoterismo y el misticismo sobre sale la "angeología", estudio
de seres alados (los ángeles) con diferentes nombres, que se pueden
contactar por medio de normas que se explican en libros, videos, cassettes
y juegos de mesa. No se puede dejar a un lado la "ufología", estudio
del fenómeno ovni y los extraterrestres, llamados como nuestros "hermanos
mayores" del universo, o los "Elohim", palabra hebrea que significa "Dios".
V. El mercado de la era de acuario
Hoy en día es común ver centros
de estudios, festivales espirituales, seminarios, conferencias de los llamados
"maestros de la luz", donde se enseña la doctrina del movimiento Krishna,
powa, reiki, akido, otaichi, el fenj shui, el shiatzu; acompañado de
librerías, almacenes y centros naturalistas donde se consigue una amplia
variedad de libros y revistas del doctor DeepaK Chopra, como su obra "Las
siete leyes del éxito espiritual", al igual que Sri Ravi SanKan, otro
hindú de la casta de los brahamanes; ambos recorren el mundo difundiendo
sus costosos métodos de meditación oriental. Otros temas son
los libros del Dalai Lama como "Los eternos valores humanos" y "Las religiones
del mundo", el "Libro de los espíritus" de Allan Kardec, los de J.J.
Benítez, asimismo de sanación física, macrobiótica,
teosofía, superación personal, parapsicología, alquimia,
ocultismo, metafísica de Cony Méndez, el significado de los
sueños, música de relajación (o étnia), artículos
traídos de Egipto, Israel, Filipinas y la India. Incensarios para aromatizar
el ambiente, collares, anillos, bolas de cristal, velas de diferentes colores
y magia blanca, candelabros hebreos, esencias de diferentes plantas, lectura
del tarot, quiromancia (lectura de la mano) y numerología, es decir,
la influencia de los números en la vida de las personas o el horóscopo
de Walter Mercado. (Compara con Salmo 94,11; Proverbios 14,15; Daniel
12,4; Romanos 10,2-3; 1Corintios 3,18; Efesios 4,17-18; 1Tesanonicenses 5,20-21;
1Timoteo 6,20-21; 2Timoteo 3,7-8; Tito 1,16; Hebreos 5,11-12; 1Juan
4,1).
VI. La medicina de la era luz
En el campo de la "Medicina Alternativa", según
los bioenergéticos el cuerpo humano tiene receptores para cada tipo
de energía que recibe el nombre de "Chacras", que son meridianos
o puntos específicos para cada parte del cuerpo; para lograr sus estímulos
se cuenta con la homeopatía (Medicina con plantas), la acupuntura china,
a electroacupuntura, que emplea un aparato llamado "dermatrón", la
utilización de cuarzos, cristales, agujas, pirámides,
la cruz de Caravaca, Budas, el ángel solar dorado, la estrella de David,
la espada del ángel San Gabriel, el dragón rojo, el unicornio
de bronce celta o pulseras de plata y oro. La fonoterapia, o sea el empleo
de frecuencias acústicas emitidas por instrumentos mecánicos
o electrónicos, que sirven para purificar las vibraciones negativas;
la masoterapia, masajes terapéuticos combinados con meditación
y secciones de hipnosis, la cromoterapia, o manejo psicológico de los
colores, que ayudan a fortalecer el sistema nervioso y síquico, la
campanología, es decir, el arte curativo del sonido de las campana;
como las tibetanas, egipcias y bizantinas; bien sea de oro para curar el cáncer
y de plata para la migraña; o también la aromaterapia, utilización
de los aromas naturales para mejorar la salud, el bienestar y la paz en el
hombre cósmico.
VII. Conclusión final
Ante todo este panorama tan variado y peligroso
para la fe del creyente, lo único que nos resta; es pedir con fervor
la misma súplica que hiciera siglos atrás el salmista: "Señor,
muéstrame tus caminos; guíame por tus senderos;...encamíname
en tu verdad" (Salmo 25,4-5).
"Al morir ...nacemos para la vida eterna".
San Francisco de Asís
Religioso -fundador de la órden de los frailes menores.
Religioso -fundador de la órden de los frailes menores.
I. Las religiones orientales
EL HINDUISMO: Para esta religión de la
India la reencarnación tiene su origen en los textos sagrados Vedas
(Conocimiento), que aparecieron entre los años 800 al 500 a.C., aquí
se enseña que con la muerte sólo desaparece el organismo, mientras
que el alma (Atman), vive muchas vidas en diferentes cuerpos hasta completar
la liberación de su ser (Moksha), por medio de un proceso de nacimiento,
muerte y reencarnación (Samsara); la meta final consiste en romper
dicho ciclo y llegar a estar eternamente en la presencia de Brahma, el "Espíritu
Universal" o el "Océano Divino"; del que surgieron todos los
seres y al que deben retornar.
La reencarnación va íntimamente
ligada al "Karma" de cada persona (la palabra Karma tiene dos significados:
"acción" y "los resultados buenos o malos de toda actividad física
o mental"); y en tal caso, la existencia futura del Atman está predestinada
por el comportamiento de toda su vida terrenal, la que será favorable
o miserable; ya que el Karma opera de una manera implacable con las personas
que se dedican al mal, teniendo como castigo el renacer en algún animal
inferior, planta o cosa. Del mismo modo, la ley del Karma es independiente
del tiempo y el espacio; y por eso, nada tiene que ver que un individuo necesite
trescientos o tres mil años de aprendizaje para evolucionar completamente.
Para la religión de los "mil dioses" los
méritos propios de cada persona, pueden tener su recompensa con el
renacimiento de alguna de sus divinidades, como es el caso de Shankara, filósofo,
místico y poeta hindú; quien por su grado de santidad se le
veía como la personificación viva de la diosa Shiva. Igualmente,
en el Ramayana, poema épico de la literatura india, se narra que su
héroe el príncipe Rama, era la reencarnación del dios
Visnú.
El Budismo: Sus creencias religiosas
se inicia con la aceptación del proceso de cambio (samsara), las personas
mueren y renacen en uno de los seis reinos de la existencia universal, descritos
en la rueda budista de la vida; entre ellos el cielo y el infierno, estados
imperfectos en los que la reencarnación depende de los progresos que
se haya hecho allí. Por último, todos los seres humanos irán
al reino "sin muerte" llamado "Nirvana". La palabra Nirvana tiene su origen
en el sánscrito y quiere decir "extinción", bien sea de las
pasiones, de los errores y demás defectos propios; lo que trae como
resultado final el colmen de la iluminación, la serenidad y tranquilidad
sin limites. Por lo tanto, quien llega al Nirvana ha vencido a la muerte y
el dolor físico.
Los budistas afirman que todos los individuos
se reencarnarán varias veces antes del alcanzar el Nirvana, llamado
también el "Gran Todo"; pero sólo los seres iluminados o "Budas"
pueden recordar sus vidas pasadas; como su fundador, el príncipe
Sidharta Gautama (2500 a.C.), quien decía tener recuerdos de mil vidas
anteriores. Asimismo, los Lamas Tibetanos plenamente realizados (o Tulkus),
pueden escoger las circunstancias de su próxima reencarnación,
e incluso indicar el lugar exacto donde renacerán, en el cuerpo de
un infante que nazca en ese preciso momento, y que deberá ser cuidadosamente
buscado unos ocho años después por los monjes, gracias a determinadas
señales y diversas pruebas de reconocimiento. El caso más conocido
es el de su gran líder el Dalai Lama, cuyo espíritu ha renacido
catorce veces hasta llegar al actual, Tenzin Gyatso (1935- ).
La Sociedad Teosófica: Fundada
en 1875 por la rusa Elena Blavatsky, en compañía de varios masones
de Estados Unidos, y algunos espiritistas. Esta secta de lo oculto y
lo secreto pregona que cada uno va experimentando progresivas reencarnaciones
hasta llegar a ser un dios o "Mahatma"; con la misión de gobernar todo
el universo. Para llegar a esta meta tiene que pasar varios siglos, como le
sucedió a su fundadora, quien aseguraba haber pasado por 32 reencarnaciones
durante 72000 años.
II. El culto a los muertos
La doctrina que predica la existencia del cielo
y el infierno como moradas eternas para el alma humana después de esta
vida, es un hecho más constante y generalizado en la historia universal.
Así lo demuestra las antiguas culturas como los babilonios, asirios
y egipcios; quienes levantaron templos y pirámides destinadas a sus
reyes y faraones para estar más cerca de ellos, y que luego despertarían
en el más allá.
Por otra parte, para las religiones monoteístas
como el judaísmo, las ofrendas a favor de los muertos son base de su
fe; como lo constata la lectura del Machsor, libro de oraciones para los días
sagrados del Yom Kipuer (La fiesta del perdón). También las
iglesias primitivas cristianas, a la cabeza con la Católica,
los Ortodoxos Griegos y Rusos, los Arrianos, Nestorianos y Eutiquianos; conservaron
en sus liturgias la costumbre de pedir por las almas de los fieles difuntos.
Mientras que para el Islam esta práctica esta consignada en el libro
del Corán.
III. El punto de vista bíblico
Los reencarnacionistas argumentan sus enseñanzas
con las Sagradas Escrituras. Según ellos, se encuentran al menos unas
600 citas para testificar lo dicho, siendo las más importantes el encuentro
de Jesús con Nicodemo, cuando le dice: "En verdad, en verdad te digo
que el que no nace de nuevo, no puede ver el reino de Dios" (Juan 3,3); a
lo que los exegetas y teólogos aclaran, que el Mesías está
haciendo referencia al sacramento del bautismo, que nos hace "volver a nacer
por el agua y el espíritu"(5-7). Así también cuando se
dice que Juan el Bautista era el profeta Elías (reencarnado), que "ha
venido ya" (Mateo 17,12); se da a entender que la fuerza del profeta recae
en la misión del Bautista, quien fue el precursor de la primera
venida de Cristo, y Elías lo será de la segunda (Parusía).
De Igual manera cuando Juan es interrogado por una comisión del Sanedrín,
si era realmente Elías, éste responde categóricamente
"no lo soy" (Juan 1,21). Sin embargo, se había predicho que Juan Bautista
precedería al Mesías "con el espíritu y el poder de Elías"
(Lucas 1,17; Malaquías 4, 5-6; Eclesiástico 48,10). En otra
oportunidad, el Señor se encarga de decir que su primo no era Elías,
pues éste "ha de venir" (Mateo 11,14); además el antiguo profeta
de Israel se hace visible al lado de Moisés en la transfiguración
en el monte Tabor (17,1-9).
La Revelación Divina también nos
dice que "está establecido que los hombres mueran una sola vez" (Hebreos
9,27); con la muerte, "el polvo (o poéticamente 'el cuerpo') vuelve
a la tierra como vino de ella, y el espíritu a Dios, que lo ha dado"
(Eclesiastés 12,7). "Sólo aquel que peque morirá. Ni
el hijo ha de pagar por los pecados del padre, ni el padre por los pecados
del hijo" (Ezequiel 18,20). "Porque todos tenemos que presentarnos ante el
tribunal de Cristo, para que cada uno reciba lo que le corresponde, según
lo bueno y lo malo que haya hecho mientras estaba en el cuerpo" (2Corintios
5,10); además la resurrección del Salvador, y las realizadas
por él, son la prueba de que cada alma fue creada para un cuerpo humano
((1Corintios 15,12-57). El apóstol Pablo agrega que al final de los
tiempos habrá resurrección tanto de "buenos" como de "malos"
(Hechos 24,15); que serán juzgados ante el tribunal supremo del Hijo
de Dios (Mateo 25,31-46; Juan 6,40; Hechos 17,31; Apocalipsis 20,11-15).
IV. El Contexto teológico
La reencarnación presenta varias lagunas
difíciles de explicar:
1. No puede definir con claridad en qué momento el alma humana empieza a existir
2. No se sabe cuántas vidas tienen que
experimentar
3. No se determina cuánto tiempo tiene
que pasar entre una reencarnación y la otra
4. No está establecido cuánto tiempo
dura todo este proceso de nacer, morir y renacer hasta alcanzar el ciclo final
5. No presenta una explicación lógica
al origen del mal, pues si solamente los buenos o los menos buenos reencarnan
en seres humanos; los malos que renacen en seres inferiores, tendrán
una desventaja al no tener conciencia de sus errores pasados.
Por otra parte, la Iglesia Católica desde
sus raíces históricas siempre negó la reencarnación
como un hecho real, y con la sola excepción de Orígenes (s.
III), quien dudó si sería posible que se admitiera en el cristianismo;
los demás Padres de la Iglesia como San Agustín, Tertuliano
o San Jerónimo; la rechazaron tajantemente. Además el emperador
Justiniano I fue uno de los principales enemigos de la misma, en el II concilio
de Constantinopla en el siglo VI. La reencarnación fue definitivamente
condenada por el magisterio eclesiástico en 1917, bajo el pontificado
de Benedicto XV.
V. Las pruebas científicas
En estos últimos años se han hecho
famoso en el mundo entero, las experiencias médicas de algunos psicoterapeutas,
parapsicólogos y siquiatras como el doctor Brian Weiss; autor de varios
libros sobre este tema, quien sostiene que es posible que con las llamadas
"regresiones hipnóticas", los seres humanos puedan viajar por el pasado
experimentando diferentes situaciones de otras vidas. Es importante aclarar
que este método no es capas de demostrar científicamente la
existencia de la reencarnación, pues muchos de los testimonios han
sido imprecisos, incorrectos, no se ajustan a la realidad de los hechos;
varios pacientes coinciden en haber sido un personaje importante como "Cleopatra"
o "Napoleón". También influye de manera especial fenómenos
de percepción extrasensorial, telepatía, clarividencia o simplemente
el terapeuta es quien induce a la persona a recrear una serie de situaciones
irreales, sugeridas o predispuestas. Del mismo modo, se pone de manifiesto
que solamente un 40% de los individuos sometidos a esta prueba resultan
positivo
Para muchos expertos este método tiene
la misma fiabilidad que los sueños, ya que ambos son elaborador por
nuestras fantasías, mezcladas con imágenes de momentos reales,
de deseos y temores del subconsciente; que constituye un depósito de
información mucho mayor del que podamos pensar. Es más, si las
reencarnaciones sucesivas del alma humana fueran ciertas; nuestra memoria,
que junto con la inteligencia y la libre voluntad, son facultades propias
del individuo; sería correcto creer, que todas las personas en estado
de normalidad síquica, sin recurrir a la hipnosis, deberían
recordar perfectamente ciertos instantes de sus anteriores vidas.
Tampoco es de extrañarse el hecho de que
los pacientes empiecen ha hablar en otros "idiomas", que
a veces son comprensibles pero con frecuencia no lo son.
Como los casos narrados en el Nuevo testamento, de los primeros
cristianos que hacían uso del "don de Lenguas"; y
a los que el apóstol San Pablo puso un toque de desconfianza,
pues "es preferible decir cinco palabras que se entiendan,
para enseñar a otros, que decir diez mil palabras
en lenguas extrañas" (1Corintios 14,19).
(extraído de: http://m.aciprensa.com/apologetica/verdades4.php)
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