por Luis Santamaría
El Centro de la Cábala en Los Ángeles anunció el pasado 16 de septiembre la muerte de su fundador, el rabino Philip Berg, líder espiritual cuyos seguidores incluían varias celebridades, entre ellas la cantante y actriz Madonna, tal como informa la BBC. Berg tenía 86 años. El rabino había estado enfermo desde 2004, cuando sufrió un accidente cerebrovascular.
Fundó el Kabbalah Center en los años 60 para enseñar una forma de misticismo que describió como “la forma más antigua de sabiduría espiritual”. Los críticos, sin embargo, presentaban al centro como una empresa cuyo objetivo primario era hacer dinero.
Los Angeles Times ha dedicado un amplio espacio a informar sobre su figura, con unos artículos firmados por Harriet Ryan. Explica que en torno a la figura de Berg destaca la controversia con su presentación ‘New Age’ y lucrativa financieramente del antiguo misticismo judío. Aunque el Kabbalah Centre afirma que ha muerto con 86 años, los registros públicos indican que tenía 84.
En un comunicado, la secta elogió a Berg por popularizar la cábala, diciendo que “creó un camino para que millones de personas aprendan y vivan” un campo de estudio antes reservado a un círculo de la élite de los hombres judíos ortodoxos. “Hoy creemos que el Rav ha comenzado a compartir con nosotros desde arriba, y todos nosotros nos mantendremos felizmente conectados e inspirados por el alma del Rav y su visión”, se lee en una parte.
Conocido por un estilo de enseñanza apasionada en la que utilizaba los aspectos de la vida moderna para poder identificarse más fácilmente con los personajes bíblicos, Berg entró en conflicto con los líderes judíos ortodoxos, enojados porque estaba enseñando lo que consideraban un tipo no auténtico de la cábala a un público inadecuado. Después de condenarlo públicamente, trasladó la sede central de su secta a Los Ángeles.
Famosos… y cientos de miles de dólares
Fue en la “sinagoga” que estableció en una antigua iglesia en Robertson Boulevard donde empezaron a aparecer famosos, incluyendo a Demi Moore, Ashton Kutcher, Britney Spears y su más famosa seguidora, Madonna. Su abrazo de las enseñanzas de la cábala hizo el centro famoso en todo el mundo. Sus ventas y el énfasis de la secta en las donaciones en efectivo por parte de miembros llenaron sus arcas. Sus activos se cree que están ahora en cientos de millones de dólares.
La viuda de Berg, Karen, y sus dos hijos, Yehuda y Michael, han llevado el centro desde su accidente cerebrovascular. Su gestión ha estado acompañada por la polémica. Después surgieron preguntas acerca de los activos importantes del centro “sin fines de lucro", y el IRS (Servicio de Impuestos Internos, la agencia norteamericana de recaudación) y los fiscales federales de Nueva York abrieron una investigación por evasión de impuestos. Madonna posteriormente apartó su actividad caritativa en África del control de la secta, y otra agencia sin fines de lucro bajo el escrutinio del Gobierno cerró repentinamente. Los agentes seguían reuniendo pruebas el año pasado, pero el Gobierno se ha negado a discutir el caso y se desconoce la situación actual de la investigación.
Según el Jerusalem Post, Berg nació en la ciudad de Nueva York y fue ordenado como rabino en Torá VaDaat, en Brooklyn. Fundó el Centro de Cábala en 1969 y abrió la sede de Los Ángeles en 1993. Su cadáver ha sido llevado a Israel para ser enterrado en la ciudad de Safed (ayer, 17 de septiembre), famosa por ser la cuna de los más importantes estudiosos y autores de la cábala en el siglo XVI.
La cábala, un nudo más de la Nueva Era
Hace cuatro años, Vicente Jara, miembro de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES) habló sobre la cábala en el programa “Conoce las sectas", emitido quincenalmente por Radio María España, y que dirige el mismo Jara. En la entrevista, el experto señaló que la cábala “no es una secta, pero entra dentro de lo que sería el esoterismo. Además, sí es cierto que hay grupos, como el ‘Centro de la Cábala’, que ahora está teniendo un cierto auge entre algunos famosos de Hollywood, de la música o del deporte… Por otro lado la Cábala es una corriente esotérica que algunos grupos de la Nueva Era también comparten”.
La Cábala apareció en el siglo XII, tal como señala Vicente Jara, pero sus seguidores dicen que su origen está en un conocimiento revelado por Dios a Adán, luego a Abraham, y también a Moisés, cuando le entregó las Tablas de la Ley, los Doce Mandamientos. Pero “esto es falso”. Este conocimiento de la Cábala es para unos pocos, unos iniciados; es esotérico, una revelación para unos elegidos. Por eso los cabalistas judíos, practicantes generación tras generación de la cábala, han protestado mucho contra las corrientes de la Nueva Era que están enseñándola a cualquier persona.
En cuanto a las prácticas esotéricas de la cábala, Jara explica que “es pura magia… Se trata de ver la Palabra de Dios, el Pentateuco como un libro de magia, y buscar significados ocultos, cuando los textos están ahí suficientemente claros, y no hay que colocar las palabras de ninguna forma buscando respuestas. Es un modo antiguo de buscar respuestas dentro de esta corriente mística del judaísmo”.
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