FUENTE: Varios medios
Todavía sorprendida dice sentirse Isis Bravo con todo lo que se ha sabido y el desenlace que tuvo Ramón Castillo, más conocido como “Antares de la Luz”, líder de la secta de Colliguay y que fue encontrado muerto el pasado 1 de mayo en Cuzco (Perú) tras suicidarse. Isis es una psicóloga transpersonal que vive entre Villarrica y Pucón y que conoció a “Antares” el año 2003. “Yo lo conocí gracias a una compañía de teatro infantil que tenía mi padre (Miguel Ángel Bravo) en Santiago y Ramón (Antares) participaba como músico. En esos años era muy tímido y no tocaba muy bien, por lo que no duró mucho en la compañía”, relató Isis en exclusiva a El Periódico.
Psicóloga que lo conoció: Antares “tenía delirios”.
En La Nación leemos que la psicóloga señaló que después de que Ramón Castillo abandonó la compañía de su padre, comenzó una relación de amistad con él. “Ramón se acercó a mí, ya que yo tenía una parcela en el Cajón del Maipo, donde hacíamos temazcal (doctrina espiritual), donde participaban personas de otros países como de México, y lamentablemente Ramón con lo que hizo, se estigmatizó esta disciplina que tiene miles de años. Ramón participó de un temazcal y realmente alucinó, le encantó y como él estaba en esa búsqueda espiritual, se acercó a mí por este tema. Me hacía preguntas, y cuando comenzó a estudiar técnicas de sanación, se le fue el ego a las nubes, comenzó con delirios, y ahí lo perdí. Comenzó a delirar”, relató Isis.
La psicóloga comentó que era tanto el egocentrismo de Castillo, que ella terminó saturada, discutieron y lo echó de su casa en el Cajón del Maipo. “Se sentía poderoso, comenzó a decir que podía meditar, se sentía bacán, y comenzó a decir que era un ser súper luminoso. Creo yo que él tenía un principio de patología esquizoide. Esto se encuentra en personas que se retiran de la sociedad, les cuesta emanar su emocionalidad, se resguardan, no saben expresar la ira de buena forma. Él tenía una patología esquizoide sexual además. Ramón tenía una onda de conquista con las mujeres, tenía una seducción”, relató la profesional.
Isis añadió que Ramón Castillo, además, comenzó a tener delirios de persecución. “Él señalaba que lo perseguían los demonios. Paralelo a eso se sentía genial, que hacía esto, que hacía esto otro. Llegaba a mi casa y me decía que había tratado a una persona y que había sentido fuego en sus manos, que había visto los ángeles. Fue ahí cuando le dije ‘Ramón… para. Si realmente estás en este crecimiento, se humilde’. Ramón sufría delirio de fantasía. Me señalaba que le habían hecho magia negra, le habían instaurado demonios, que le habían hecho un exorcismo, y cuando se liberó, se encontró con Jesús en una de sus meditaciones. Es más… Jesús en esa oportunidad le pidió ayuda a él, bueno, esa noche lo tuve que echar de mi casa porque ya era mucho”, relató Isis ya con algo de risas.
Cabe señalar que Ramón era abstemio, no bebía, no fumaba, no consumía drogas, “pero tenía delirios igualmente. Si él tomo drogas o plantas en el momento del sacrificio del bebé, eso no tenía nada que ver con la patología que él tenía. Cuanto una persona tiene una patología de ese nivel, tome alcohol, tome algún jarabe, tome lo que tome, cualquier sustancia, simplemente va a acelerar el proceso. La gente que consume marihuana no es como Ramón y no queman bebés, a no ser que tengas crisis de pánico. Si eres una persona consciente y normal, no hay problema. En este caso no es la planta la responsable, es él”, aseguró la especialista.
“Yo le dije que estaba demasiado egocéntrico, que ya me daba lata escucharlo”, agregó Isis, quien reconoció que en más de una oportunidad el hombre trató de seducirla. “Pero yo en ese momento ya tenía pareja. Él me decía que tenía un poder sexual y que podía conquistar a cualquier mujer”, señala. Pero Isis confesó que las veces que lo vio siempre estuvo con dos amigas presentes, las que en algunas oportunidades lo acompañaron a su parcela y alojaban en carpa. “Me llamaba la atención que eran chicas muy jóvenes y de clase ABC1”.
Isis añadió que después de unos años quiso saber de Ramón. “Me dieron ganas de llamarlo, de saber de él. Siempre andaba muy mal económicamente, además que tenía una relación alejada con su madre. Era un hombre súper solo, por eso quise saber de él y saber cómo estaba y no pude nunca encontrarlo, hasta que hace 3 días atrás me metí a Facebook y vi su foto. Era la foto que circulaba de la PDI y yo asumí al comienzo que era una broma, que habían trucado esa imagen con el típico ‘Se busca’. Luego veo los comentarios que había acerca de Ramón y decían algo así como ‘rata asesina’, ‘mataste a ese bebé’ y ahí me metí a Interpol para saber más datos y me entero que no era broma. Me di cuenta de todo. Quedé en shock”.
Isis Bravo dijo no tener palabras para expresar lo que siente al saber que su amigo (o ex-amigo) fue líder de una secta que sacrificó a un bebé de tan sólo 2 días de vida. “No hay palabras para expresar. Los demás integrantes de la secta estaban manipulados. Cuando un líder sabe lavarle el cerebro a alguien, ese alguien es muy vacío, ya que para que hagan eso contigo, tu ni siquiera sabes quién eres, no sabes cuáles son tus aptitudes en la vida, cuál es tu búsqueda, no sabes nada de ti. Por tanto es fácil llenar a alguien vacío”, aclaró la sicóloga.
“Yo llegué a esta zona para cambiar mi calidad de vida. Vivo con mi esposo quien es de Israel y mis 2 hijos. Nosotros hace años que damos cursos, seminarios, como profesora de medicina alternativa. Yo siempre digo a las personas que no busquen afuera. Ninguna persona va a ser el maestro de nadie, a no ser que sea una persona realmente iluminada. Todos los demás son humanos y debemos rescatar lo mejor de las personas. Todo lo que necesitan está dentro de uno. Por eso hay que aprender a quererse, aceptarse. Ahí van a encontrar todo y si encuentran alguien especial, rescaten lo mejor de él o ella”.
Finalmente, Isis señaló que le habría gustado que Ramón Castillo se hubiera entregado a la Justicia. “Pero era absolutamente predecible que esto iba a ocurrir, ya que era muy cobarde, con el mundo exterior, además que tenía ese delirio de persecución, por eso se suicidó”, sentenció Isis Bravo, esta psicóloga transpersonal.
Su familia: “le puede pasar a cualquiera”
"Lo que le pasó a Ramón le puede pasar a cualquier ser humano". Con esas palabras, Daniela Castillo Gaete, la hermana de Ramón, el líder de la secta de Colliguay, analiza los hechos que hoy enlutan a su familia, desde la noticia sobre el crimen de un bebé a manos de "Antares" hasta su misma muerte, ocurrida el 1 de mayo en Cuzco. En conversación con Emol, Daniela explica que jamás imaginó que su hermano pudiese ser protagonista de tal sacrificio humano –ocurrido el pasado 23 de noviembre- enfatizando que desde siempre se caracterizó por ser una persona muy normal y con mucho talento musical.
"En su vida aprendió a tocar charango y estudió como siete años clarinete. También fue un líder positivo en scout, por eso es que pienso que lo que le sucedió pudo haberle pasado a cualquiera, algo le hizo clic junto con el consumo de drogas, lo que lo llevó finalmente a actuar de esa manera", continúa la mujer, agregando que incluso su conducta pudo haberse alterado debido a rasgos hereditarios. "En mi familia hay antecedentes de alguna enfermedad mental y quizás eso también pudo haber empeorado las cosas, la mezcla de todo eso fueron nefastas", estableció.
Asimismo, asegura que aún no cree que Castillo -el prófugo más buscado durante la última semana en CHile- haya realizado sacrificios con animales, argumentando que "Ramón los amaba". "Todavía tengo a su gata ploma a la que él adoraba, incluso dormía con ella", recuerda, atribuyendo que los actos cometidos por su hermano se vieron alterados sólo por el consumo en exceso de ayahuasca.
Sobre el cambio de personalidad que experimentó Castillo, asegura que "desde hace cinco años comenzó a ser muy hermético con su tema de la búsqueda del 'yo' y esas cosas medias esotéricas. Con suerte lo veíamos una vez al año para el cumpleaños de mi mamá". Sin embargo, afirma categórica que su hermano logró realizarse casi al 90 por ciento en los 35 años que alcanzó a vivir. "Viajó a Perú, Bolivia, Ecuador y hasta a China tocando con su grupo Amaru, y bueno, el resto fue el resultado de sus elecciones personales", dice, recalcando que "me quedo con los mejores recuerdos de él".
Sobre la repatriación de los restos de "Antares" afirma que ya se realizaron todas las gestiones con el Ministerio de Relaciones Exteriores para que puedan ser traídos al país y "darle una digna sepultura". "Algunas personas de la familia incluso van en viaje porque es necesario que alguien reconozca su cuerpo", continuó, desmintiendo así todas las versiones que indican que los restos de "Antares" no habrían sido reclamados por sus cercanos.
Al llegar al terminal de buses de Cuzco, un tío de Ramón Castillo señaló a los periodistas que muchas cosas de las que se dicen sobre su sobrino no son ciertas. “Muchas cosas no son verdad… no, no les voy a decir porque si tú quieres saber acerca del caso en sí te tienes que dirigir a la PDI, al BIPE, ellos son los que saben contestar y están estudiando el caso”, dijo Gustavo Gaete a los medios chilenos y peruanos que lo esperaban en el lugar de la ciudad fundada por los incas. Lo leemos en La Nación.
Gaete comentó que “el caso tiene ocho mese de investigación, no es una bicoca, son ocho meses y hay muchas dudas”. El padre del principal acusado por el caso que impacto en el país ya que se trata de un grupo de personas que sacrificó ritualmente en diciembre pasado a un lactante de dos días también llegó hasta la ciudad andina. Sin embargo, no formuló declaraciones, ya que se sintió acosado por los periodistas presentes, por lo que requirió el resguardo policial.
Entra en juego una médium
Carmen Cancino, la psíquica más cotizada por los programas de televisión de Chile, aseguró haberse comunicado con el líder de la secta de colliguay, Ramón Castillo, quien se suicidó en Perú luego de estar dos semanas prófugo de la justicia por el asesinato de un recién nacido en noviembre del año pasado. En una nota para el matinal de Mega, "Mucho Gusto", la "médium" aseguró comunicarse con Castillo -más conocido como "Antares de la Luz"- y también con otros dos fallecidos miembros de la secta que practicó el rito que conmocionó a la opinión pública.
Luego de la interacción, Cancino aseguró que estos seres no tienen claro que están muertos y que por lo mismo, "sus conductas espirituales continuarán en el tiempo y van a seguir actuando en la línea de la oscuridad", expresó. Además afirmó que "Antares" "se ha hecho más poderoso y podría ser invocado", advirtió la médium.
Prosiguen las investigaciones
El pasado 8 de mayo la PDI anunció la preparación de un perfil psicológico de todos los detenidos de la secta de Colliguay liderada por el fallecido Ramón Castillo Gaete, alias "Antares de la luz". Fuentes indicaron a Emol que también se realizará un perfil del líder del grupo. Esto a través de las declaraciones de los que participaron en el ritual que terminó con un lactante muerto, en el fundo "Los Culenes" de Colliguay en noviembre.
Según los primeros antecedentes, la mayoría de los miembros de la secta sufrieron episodios de "bullying" durante su etapa escolar, en particular Castillo y el sindicado como el "segundo hombre" de la comunidad, Pablo Undurraga. Trascendió que en sus declaraciones, los miembros de la secta dijeron que cuando se drogaban con ayahuasca –que es consumida por chamanes peruanos una vez cada tres meses a diferencia del controvertido grupo, que lo hacía en forma recurrente- veían "batallas entre ángeles buenos y malos, y luego aparecía la mano de Castillo golpeando la tierra, lo que hacía saltar a los combatientes debido a su gran poder".
Personas puras e impuras
"Puras", "impuras" y "oscuras". Esa era la categorización que la secta liderada por el fallecido Ramón Castillo Gaete hacía de las personas, según los últimos antecedentes de la investigación, revelados por Emol. Dicha condición estaba dada por la cercanía que el hombre o la mujer tenía con la agrupación y su aceptación de que Castillo, alias "Antares de la luz", era dios.
De acuerdo a la información entregada a Emol, en la categoría de "puro", sólo se encontraba Castillo, pues "él era la luz". En el nivel de los "impuras" estaban todas las personas que componían la secta que incineró a un bebé en un fundo de Colliguay y que "caminaban hacia la luz". De acuerdo a sus declaraciones, Castillo les aseguró que estaban dotados de poderes.
Por ejemplo Pablo Undurraga –el segundo líder del grupo- tenía el poder de la sanación y era mencionado por Castillo como "el erudito", ya que era el más cercano a él. Mientras que María del Pilar Álvarez tenía la capacidad de la transmutación, por lo que ella tenía las herramientas para "sacar los males del cuerpo". Por último, estaban los seres "oscuros", aquellos que simplemente no creían en "Antares".
Fuentes del caso señalaron que toda la literatura que leía Ramón Castillo era del antropólogo y escritor Carlos Castaneda, cuyos libros fueron acogidos como obras de culto en las "búsquedas trascendentales" de los jóvenes de los años 60 y 70. Entre sus escritos destacan Las enseñanzas de Don Juan, Una realidad aparte y La Rueda del Tiempo, en los que se habla, por ejemplo, sobre "alcanzar diferentes estados de conciencia".
Segundo fin del mundo
De acuerdo a los datos de la investigación, tras el sacrificio del hijo nacido entre Castillo y Natalia Guerra, en Colliguay, el grupo se preparó para consumir ayahuasca y esperar el fin del mundo, que sería el 21 de diciembre pasado. Como eso no ocurrió y algunos de los seguidores desencantados se alejaron del grupo, Castillo les dijo que "se le había revelado una nueva fecha del cataclismo".
El desastre mundial ocurriría el 21 de marzo de este año, por lo que el grupo debía estar en Ecuador para esa fecha pues ahí él se iluminaría. Sin embargo, al enterarse que estaba siendo investigado por la PDI, Castillo partió a Cuzco en febrero, donde la semana pasada se quitó la vida.
Sangre del bebé asesinado
El equipo de la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales que indaga el caso encontró un nuevo antecedente, que se espera aporte en gran manera en la investigación, según informa Infinita. Se trata de cinco gotas de sangre del lactante que fue incinerado durante el ritual realizado por el grupo en el fundo "Los Culenes" y que se encontraban en un laboratorio clínico de la Universidad de Chile, según informa el Diario El Mercurio.
De acuerdo al matutino, dicha muestra fue tomada en la clínica en que nació el pequeño el pasado 21 de noviembre y luego enviada al recinto para exámenes de rutina. La evidencia será clave, ya que con ella se cotejará si el ADN del lactante corresponde con los restos óseos encontrados en Colliguay y con las muestras del fallecido Ramón Castillo Gaete, que se espera lleguen en los próximos días desde Perú.
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